Se imaginan que en un parte del Nevado de Toluca este escondido un tesoro, el cual fue enterrado desde 1760, no pues existe la posibilidad de que esta leyenda pueda ser realidad, ya que en 1942 unos amigos se encontraron en el rancho de uno de sus padres un documento donde un tal Bartolomé confesaba esa “hazaña”.
De acuerdo a Mitos y Leyendas del Estado de México este escrito había sido elaborado por Bartolomé Juan del Castillo, un ladrón que junto con su banda operaron en los alrededores del Nevado de Toluca.
El botín de sus fechorías había sido acumulado por años, ya que pensaba dejarle todo a su hijo quien había abandonado junto con su madre.
El documento de confesión, relata el sitio web del Edomex, era amarillento debido al tiempo que estuvo guardado además estaba escrito en lápiz.
Parte de la carta dice: “año de 1760, yo, Bartolomé Juan del Castillo, en nombre de Dios Padre que me crió y me conserva, hago la confesión siguiente: Siendo el jefe de los ladrones que operaban en la Sierra del Nevado, yo como depositario de grandes robos de conductas que llevaban grandes tesoros que se conducían a España, y que pasaban por estos campos y de varios puntos de los minerales declaro en nombre de Dios Todopoderoso, ser cierto todo lo que voy a escribir”.
Prosigue: “Declaro que en la Cañada del Jicote que se halla en los Montes de los Estrada, de su lugar donde se juntan dos aguas, una chica y otra mayor, de allí por abajo donde hace un salto chico, está un subterráneo, su puerta es pequeña, apenas puede caber el cuerpo de un hombre, está al pie de una corta peñita, dicha puerta está cubierta con una losa que a su vez está cubierta con tierra, aquí hay intereses muy grandes. Y del salto para arriba, en esta misma cañada está otra que no tiene peña, está en la loma o costado de la cañada, está donde hay muchas hierbas de otatillo.
“Allí está el convoy que se le quitó al virrey O Donojú en el paso del macho, este fue como un millón de dinero, al frente se encontrará un altar hecho de mezcla donde está colocado el señor del hospital, que es el que veneraban antes, más también se encontrarán los útiles de plata y oro con que se servía el virrey hay una gran cantidad de barras de plata formando un camellón, también se encontrará un gran depósito de ornamentos, y a un lado, otro altar con el Cristo de oro del Virrey”, destaca que el delincuente.
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Con información de El UniversalEdomex