Los barcos de vapor llegaron a la ciudad de México e incluso a unos de los sitios más emblemáticos del Estado de México, el lago de Texcoco.
Esta maravillosa historia nos la cuenta WikiMéxico quien nos traslada 160 años atrás, cuando la ciudad de México estaban dominada por las aguas del gran lago; además una serie de ríos y riachuelos que recorrían los cuatro puntos cardinales del gran Valle de México.
Pues bien, algunas cosas “modernas” que llegaron a México en 1850, eran los barcos de vapor, uno de ellos arribó al Lago de Texcoco
Otra embarcación de nombre Esperanza realizó su primer viaje de la Ciudad de México aún lugar de la entidad mexiquense, el poblado de Chalco.
A partir de entonces, los barcos de vapor recorrieron los lagos del valle de Anáhuac y sus diversos canales, llevando pasajeros de Guadalupe-Hidalgo (actualmente la Villa), Tacubaya, San Ángel y Tlalpan a los hermosos vergeles de Xochimilco, Santa Anita o Ixtacalco.
Un dato curioso que se cuenta es que en 1869, el barco de vapor llamado Guatimoc realizó seis viajes de prueba antes de invitar a Benito Juárez, presidente de México a realizar un recorrido por el lago.
El primer mandatario fue despedido en el muelle de La Viga.
La embarcación avanzaba cuando un gran estruendo sacudió a los invitados: una de las calderas había estallado. No hubo muertos pero sí un buen susto.
Al hacer la crónica del incidente en el periódico El Renacimiento, Ignacio Manuel Altamirano escribió: “Llama la atención la buena fortuna del presidente quien sale siempre ileso de todos los peligros”.
VER: La grabación nunca vista de Plaza Satélite
Con información de WikiMéxico