En México, estamos en la estación donde la lluvia está presente todos los días, el verano.
Para nosotros, las precipitaciones pluviales son un dolor de cabeza debido a que el transporte público se vuelve lento, se incrementa el tráfico y nos mojamos así de simple
Pero sabías que nuestros antepasados no veían estas debilidades cuando era la época de lluvias, al contrario celebraban que existiera esa estación e incluso tenían un dios por este hecho climático.
El sitio web Arqueología Mexicana hace una pequeña recopilación de los dioses de la lluvia que eran siete en distintas comunidades.
Uno de ellos era el dios de la lluvia llamado Tláloc (o Tlálloc) entre los nahuas mientras que entre los mayas se le conocía como Chaac (o Chaahk).
Para los zapotecos era Cocijo (o Cociyo), los mixtecos lo llamaban Dzahui (o Savui), los totonacas Tajín (o Aktsini).
Desde luego, esta lista no es exhaustiva ya que en Mesoamérica había por lo menos tantos nombres de dioses o espíritus de la lluvia como idiomas o culturas.