A sólo 50 kilómetros de la Ciudad de México se encuentra el Pueblo Mágico de Teotihuacán, el cual cuenta con un vasto yacimiento arqueológico, pero también con lugares de tradición como el Exconvento de San Juan Bautista.
En el Templo de Nuestra Señora de la Purificación, ubicado en el barrio de La Concepción, se puede recorrer su tianguis donde la oferta de antojitos de la región y artesanías lo hace muy atractivo y colorido.
El Jardín de las Cactáceas cuenta con plantas endémicas de la región, en el que los paseantes podrán encontrar palmas de diferentes especies, magueyes, biznagas y numerosas variedades de cactus.
De acuerdo con el portal pueblosmagicos.com.mx, está la opción para los más pequeños de visitar Reino Animal, el cual se ubica con rumbo a Tulancingo, y en donde se puede disfrutar de los animales en libertad, con actividades de concientización en cuanto al respeto a los animales, así como ordeña de cabras, doma de caballos y paseos en pony.
En Teotihuacán, además de su impresionante sitio arqueológico, están los viajes en globo aerostático por medio de los cuales se pueden admirar las pirámides en toda su magnificencia, así como diversos atractivos naturales como baños en temazcal y recorridos en bicicleta por zonas naturales de la región.
Las Pirámides del Sol y de la Luna, así como recorrer la Calzada de los Muertos, son de los atractivos principales de la ciudad, y siempre tienen algo nuevo qué ofrecer, además de la Feria Regional de la Obsidiana, la fiesta dedicada a San Juan Bautista y la celebración en honor del Cristo Redentor.
Desde la Ciudad de México se puede llegar muy fácil por la salida a Pachuca, en avenida Insurgentes Norte hasta la caseta, con el señalamiento que desvía a las Pirámides, se toma entonces la carretera que México-Tuxpan o la libre que va a Pachuca.
En autobús, desde la Central de Autobuses del Norte, existen numerosos tours que llevarán a las Pirámides, o la opción que se encuentra en la salida de la estación Indios Verdes de la Línea 3 del Metro.
